Estamos hablando del esparadrapo, uno de los materiales desechables más usados en enfermería, de un básico que no puede faltar en tu botiquín de primeros auxilios. Es un material de tejido resistente compuesto, por un lado, de una cara adhesiva que sujeta vendajes o gasas a la piel, inmoviliza una zona o ejerce presión, y por la otra, tiene diferentes materiales no adherentes.
TIPOS DE ESPARADRAPO

Esparadrapo de tela
Se fabrican con tejido de alta permeabilidad al agua y al vapor de agua y destacan por su alta adherencia. Son muy transpirables, de gran adaptabilidad, extensibles y muy porosos. Están indicados para zonas de gran contacto por su gran permeabilidad y adaptabilidad.

Esparadrapo de papel
De tejido de celulosa y gran porosidad. Indicados para fijar compresas y material de curas (cánulas, sondas, apósitos faciales, dispositivos de ostomía). Los esparadrapos de papel son ideales para pieles sensibles y usos prolongados.

Esparadrapo de seda
Principalmente para pieles sensibles. Destaca por su alta adhesión, resistente y adaptable, es hipoalergénico y protege contra el agua y la suciedad. Se emplea para la fijación de todo tipo de vendajes, apósitos y compresas, sondas y cánulas, tubos de alimentación, drenajes…

Esparadrapo de plástico
Indicado para la fijación de compresas y vendas, material de curas, sondas y catéteres. Se emplea principalmente en partes del cuerpo en movimiento por su flexibilidad y para visualizar sondas de medición.